10 tips para que tu perro coma bien y sano
Los hábitos alimenticios que establezcas pueden ser una de las claves principales para que tu perro tenga una vida larga y saludable. Sigue estos consejos para conseguir la dieta canina perfecta.
- Empieza desde cachorro a alimentarle bien. ✔️
- Proporción adecuada de omega 6 y omega 3. ✔️
- Establece horarios y rutinas. ✔️
- Elige la alimentación específica para su etapa adulta. ✔️
- Respeta la transición de un pienso a otro. ✔️
- Atento a su apetito. ✔️
- Principio de individualidad. ✔️
- Benefíciate de la alimentación mixta. ✔️
- Aprende a saber leer las etiquetas nutricionales. ✔️
- Elige la alimentación específica su etapa sénior. ✔️
A continuación, entra en detalle en cada uno de estos tips:
Empieza desde cachorro a alimentarle bien
Los cachorros son enérgicos, juguetones y un poco traviesos. A lo largo del día queman el triple de calorías que un perro adulto. Están en pleno crecimiento y desarrollo de sus músculos, huesos, pelaje, dientes… por lo que necesitan una alimentación que les aporte un gran número de proteínas.
Para que tu amigo de cuatro patas tenga una larga vida sana y feliz es esencial una buena alimentación desde cachorro. Asegúrate de recibir asesoramiento nutricional para mascotas para elegir el mejor pienso para tu cachorro.
Proporción adecuada de omega 6 y omega 3 en la alimentación de perro
Durante el crecimiento para potenciar unos huesos y unos dientes fuertes son necesarios minerales esenciales; el calcio, el fósforo, el magnesio, el zinc, el hierro y la vitamina D. Para estimular una piel sana y un pelo radiante es necesaria una proporción adecuada de ácidos grasos y omega 6 y omega 3.
Establece horarios y rutinas
Es necesario seguir una rutina de alimentación uniforme y alimentar a nuestro perro todos los días a la misma hora, teniendo siempre libre acceso al agua, ya que la hidratación es fundamental para el buen funcionamiento de sus órganos.
Elige la alimentación específica para su etapa adulta
Cuando el perro alcanza la madurez es necesario establecer unos hábitos alimenticios que se adecuen con su tamaño, metabolismo y vitalidad. Ya no consume tanta energía como los cachorros por lo que su alimento no necesita tantas calorías. Su alimentación tiene que ser rica en proteínas, grasas, hidratos de carbono, minerales y vitaminas… ¡y sobre todo no le puede faltar nunca el agua!